Cómo crear un álbum ilustrado infantil

Nunca le hice demasiado caso al asunto de los álbumes ilustrados infantiles, pero estando en la universidad, tuve una asignatura que los abarcaba.

Tengo que admitir que cambié mi opinión por completo, llegando a crear mi propio álbum y publicándolo.

Si quieres crear tu propio álbum ilustrado, te enseñaré todo lo que aprendí de aquella experiencia de la manera más sencilla y directa, para que realices tu álbum ilustrado y te sientas orgulloso de ello.

Por supuesto me centraré en el álbum ilustrado infantil, pero ten en cuenta que existen otros tipos, como los álbumes ilustrados juveniles y adultos, pero el proceso sería prácticamente el mismo.

¿Qué es un álbum ilustrado?

Si estás aquí es posible que esto sea algo obvio para ti, pero como quiero hacer que este artículo abarque a todos los niveles creo que merece la pena comentarlo.

Un álbum ilustrado es una historia narrativa elaborada en imágenes no secuenciales que puede o no contener texto.

Con “imágenes no secuenciales” quiero alejarlo de la idea de otros medios como el cómic o el cine.

En resumen, una historia ilustrada que puede o no apoyarse en texto.

Dentro de los álbumes ilustrados, los más populares son los infantiles, pues funciona muy bien con los niños y niñas que disfrutan de historias de narrativa visual.

Diferencia entre álbum ilustrado y cuento ilustrado

Creo que es importante hacer este pequeño paréntesis, porque a veces lo englobamos todo en el mismo saco.

El álbum ilustrado tiene una base de ilustración a página completa, donde puede tener un poco de texto apoyando la historia.

El cuento ilustrado tiene una base de relato escrito, apoyado por algunas imágenes.

¿Qué tengo que tener en cuenta al crear la historia de mi álbum?

Lo más importante es ser consciente de que está enfocado a un niño o niña que rondan entre los 2 y 8 años de edad. Teniendo en cuenta esto, será recomendable adaptar el nivel del lenguaje a tu público, los más pequeños.

Aquí quiero hacer un inciso.

No estoy diciendo que por ello solo se puedan contar historias sobre aprender a ir al baño o historias basadas en la relación con los papás y mamás. Lo que quiero transmitirte es que es primordial utilizar un lenguaje ligero y accesible, dejando la prosa barroca para otra ocasión.

Por cierto, esto no quiere decir que por utilizar un lenguaje más básico vaya a ser fácil contar una historia.

Te recomiendo que dejes de creer que solo puedes hablar de ciertos temas, a los niños se les puede hablar de cualquier cosa y contar las historias y relatos que te apetezcan sobre sentimientos, deportes, oficios, aficiones, historia del mundo, fantasía… incluso temas delicados como perder a un ser querido. (sí, existen álbumes ilustrados infantiles hablando de la muerte).

Que sean niños no significa que sean torpes ni por asomo, así que trata a los pequeños con respeto y sabiduría a la hora de elegir el tema de tu álbum o cuento. Solo preocúpate de que sea accesible e interesante para ellos.

¿Cómo encontrar la inspiración?

¡Ay! la inspiración…

Si estás buscando cómo crear un álbum ilustrado infantil y has llegado aquí, es porque probablemente ya tengas una historia en mente. Pero como la inspiración es caprichosa, te dejo algunas ideas que pueden despertar tu creatividad.

  • Observa tu alrededor: Cualquier situación puede darte buenas ideas para una historia, desde cosas simples como jugar a la pelota, a cosas más complejas como ir al médico.
  • Transforma la realidad: No todas las historias tienen que ser sobre asuntos cotidianos, si eres fan de la fantasía puedes transformar esas experiencias cotidianas en historias fantásticas, llevándolas a un tiempo y espacio diferente. ¡Imagínate cambiar una rueda de tu vehículo espacial en Marte! O hacer una carrera de caballos ¡pero usando dinosaurios, en la prehistoria!
  • Adapta un cuento: Una buena estrategia, que se ha utilizado mucho, es la adaptación de un cuento clásico y darle tu punto de vista o adaptarlo a un público infantil.
  • ¿qué quieren los pequeños?: Estate atento a los niños que tienes a tu alrededor, pueden ser tus hijos, sobrinos, primos, hijos de amigos… en cualquier momento podrías inspirarte en las cosas que a ellos les gustan para crear una historia interesante y divertida para ellos.
  • Escucha los problemas de los papás y mamás: No sé si ya eres padre o madre, pero si no es así, escucha atentamente a las quejas de otros padres, a las anécdotas que tienen con sus pequeños. Tal vez tu cuento les ayude a no tener miedo de la oscuridad, o la historia de una niña que usaba ortodoncia y le hacía sentir especial… realmente si algunos padres tienen problemas con sus pequeños, tal vez otros estén pasando por lo mismo, por lo que tu cuento puede servir a muchas personas.

Crea tu propio estilo de dibujo, para niños.

Este apartado puede tener cierta controversia, porque realmente, casi cualquier estilo es interesante si se utiliza bien a la hora de crear una historia para niños. Las ilustraciones pueden ser de muchos estilos diferentes…

Pero se suele aconsejar que sean coloridas y llamativas para los niños y las niñas pequeñas, aunque hay álbumes con colores muy suaves, por lo que no es una norma.

Pero si me permites un consejo en este punto es que lo ideal sería adaptar un poco el estilo de dibujo, para que resulte sencillo y, sobre todo, entendible para los niños. Es decir, que sea capaz de captar las formas y elementos tales como los personajes y fondos. Haciendo que todo sea reconocible para los niños.

En su momento yo adapté mi estilo para las ilustraciones infantiles, ya que suelo dibujar con un estilo de cómic adulto y puede desentonar a la hora de contar una historia para un álbum ilustrado infantil.

Guía para crear tu álbum ilustrado paso a paso.

Vale, vale, ya empiezo a darte las instrucciones de cómo crear tu álbum infantil paso a paso, pero entiende que era necesario aclarar algunas cosas.

Para este ejemplo, crearé un álbum ilustrado de 32 páginas en total, contando con la portada, contraportada, guardas, etc… lo veremos más adelante.

Solo quiero decirte una última cosa antes de ponernos en marcha, y es que tienes que entender que este es el proceso que yo he seguido para crear mi álbum y es la que seguiré utilizando. Cada autor tiene sus métodos y turcos. Yo te hablaré de lo que me ha funcionado a mí.

Por cierto, lo que te voy a enseñar es lo que aprendí en la asignatura de ilustración infantil de máster de dibujo que realice en a universidad de Bellas Artes de Granada, con ciertos cambios que he creído que podrían ser más interesantes y que agilizarán el proceso.

¡Espero que te sirva para crear tus álbumes ilustrados infantiles!

¿De qué va tu primer álbum ilustrado infantil?

Encuentra un tema con el que te sientas a gusto y te resulte interesante. Elige bien sobre qué vas a escribir y contar a los niños, ya que el cuento irá dirigido a ellos.

Elige un tema sin miedo, como ya te he dicho por ser niños no necesariamente tienes que buscar una temática simple, lo importante es que el mensaje sí sea sencillo de entender para ellos.

Piensa que te vas a tirar un buen tiempo hablando de ello, por lo que una vez más te aconsejo que el tema sea divertido y te ilusione contarlo sin cansarte a los dos días.

Este consejo es importante, evita obsesionarte con elegir un tema que le pueda gustar a los demás, es importante que te guste a ti, porque eso hará que te impliques más a la hora de hacer un gran trabajo. Si tu estás satisfecho con el proyecto, tendrás más garantías de que le guste a los demás.

Comienza a escribir.

Cuando tengas tu historia escrita y la hayas repasado, enseñádsela a tus amigos y familiares. Pide opinión a otros ilustradores, escritores y gente del sector con los que tengas relación.

No temas hacer los cambios que necesites y cuando estes satisfecho, deja tu texto reposar unos días en un cajón. Si cuando vuelvas a leerlo te sigue gustando y no necesita más cambios, significa que es el texto adecuado.

Bien, ya tienes el texto claro, ahora divídelo, recuerda que las páginas que tendrá tu álbum serán 32, contando con las guardas, créditos y portada.

Ayúdate escribiendo una escaleta para ordenar tu historia y manejarla con facilidad. Así tendrás claro los puntos clave de tu historia para crear las ilustraciones.

¿Qué forma tendrá tu libro?

Seguro que te has paseado por las librerías a ver los álbumes de otros autores y has visto que hay una gran variedad de portadas, todas con formas distintas. Libros redondos, cuadrados, rectangulares, con siluetas y formas llamativas… ¡Es casi infinito!

Que eso no te agobies. Ve probando formas, inspírate en los autores o libros que más te gusten o simplemente experimenta con distintas formas hasta encontrar la que mejor se adapte a lo que tú quieres contar.

Yo para esto soy muy clásico, me gustan rectangulares o como mucho, cuadrados.

Estructura el contenido y elige el formato.

El álbum que en el que yo me baso para el ejemplo será de 32 páginas y a doble página, es decir, cada ilustración abarcará dos páginas. Esto tiene una ventaja ya que se harían la mitad de ilustraciones, aunque finalmente rellenas el mismo espacio que si hicieras una ilustración por página.

Por cierto, al hacerlo en doble página ayuda a que ambas páginas fluyan.

Qué ilustraciones necesitas hacer exactamente.

Bien, una vez que tienes la historia pensada, tienes que elegir cuales son los puntos clave de cada parte, para realizar una ilustración que plasme el momento más épico y/o significativo de la escena.

Elige el momento clave de la historia para realizar tu ilustración, que permita ser entendida en todo su contexto.

Bien ahora que ya sabes cuál es la forma, el formato y qué tipo de ilustraciones hacer en cada pliegue, vamos a ponernos manos a la obra con la parte más divertida.

¿Cómo hacer un Storyboard?

¿Recuerdas la escaleta que hiciste hace un momento? Esas en las que podrás contar tu historia, pues es hora de comenzar a dibujar lo que te gustaría que se mostrara.

Con dibujar, me refiero a bocetar, no hagas dibujos finales, el storyboard tiene que ser realizado con bocetos. Esto te permitirá tener una visión global de cómo quedará el álbum.

Te aconsejo no dibujar lo que ya estás contando con palabras, mejor aprovecha el dibujo para añadir narrativa a la historia. Es decir, si escribes algo como “Daniel subió al desván y descubrió que su perrito estaba allí escondido” no necesitas dibujar al niño subiendo las escaleras, dibújalo ya sentado junto al perro.

Te pongo otro ejemplo, pero al revés. Es decir, imagínate que haces una ilustración donde se ve a un niño en la calle con un paraguas, porque llueve, cruzando la acera, bien, pues en el texto no tendría sentido poner “Daniel cruzó la acera para ver a su amigo, justo cuando empezó a llover, por suerte llevaba su paraguas” no es necesario que pongas que empezó a llover ni que lleva el paraguas, ya se ve en la imagen. Pon algo así “Daniel cruzó la acera y se encontró con su amigo Pablo”

¿Entiendes a qué me refiero con esto? El dibujo y el texto tienen que complementarse, no repetir dos veces lo que está sucediendo.

Haz tu ilustración de tal manera que pueda entenderse sin ayuda del texto y que al unirlo con el texto forme un mensaje más completo y enriquecedor. Esto le dará calidad a tu historia.

No te conformes con el primer resultado, experimenta otras composiciones y puntos de vista, trata de encontrar la mejor visión de lo que quieres transmitir en tu cuento.

Organización en el dibujo.

Tanto al realizar tu storyboard como al hacer las ilustraciones finales debes tener ciertas cosas en cuenta al componer tus páginas.

  • Crea una línea central, justo por donde se doblará el pliegue. Te recuerdo que haremos el álbum a doble página, esto significa que se plegará por el centro. Te aconsejo que dibujes una línea imaginaria central que divida la página por la mitad y evita dibujar elementos importantes cerca de esa línea.
  • Crea un marco alrededor de la página de 2cm como mínimo. Además, es aconsejable crear una franja de 2cm, también sobre la línea imaginaria que hemos hecho en el punto anterior. Como ya te he comentado, evita dibujar elementos importantes en los marcos o la franja central. Esto se hace para que al llevar el libro a imprenta no se corte nada importante por error o mala planificación, ni se pierda información al crear el pliegue del libro por la mitad.
  • Reserva un espacio para el texto. Esto es un clásico, hacemos nuestra ilustración super currada y cuando vamos a meter el texto, no tenemos sitio. Esto te obliga a colocar los textos de manera forzada en donde haya quedado algo de sitio, danto un aspecto apelotonado o demasiado pequeño, para así no tapar la ilustración. Bien, pues esto se puede evitar haciendo un recuadro donde iría el texto y tenerlo en cuenta a la hora de hacer la ilustración.

Haz el Monstruo.

¿Que haga el qué? ¿Qué es eso del monstruo?

El monstruo es una maqueta de tu libro ilustrado, donde realizarás tus bocetos y anotaciones.

Para hacer esa maqueta coge 8 hojas, yo suelo utilizar tamaño A4. Las coloco en formato apaisado (horizontal) y las doblo por la mitad, en una línea vertical, creando así un pequeño libro. Por último, lo grapo por el centro, como una revista.

Esto te ayudará a hacerte una idea de cómo está quedando tu álbum y te ayudará a tener mejor visión de los cambios que necesites hacer y cómo será el resultado final.

Ahí puedes dibujar tus bocetos o pegarlos y si necesitas cambiar algo, dibújalo en otra hoja y luego la pegas encima.

No tengas miedo de hacer todos los ajustes que necesites, rehacer bocetos, cambiar la composición, modificar el orden, eliminar elementos… para que tu álbum se vea como a ti más te guste.

No pases por alto este paso ni lo menosprecies, porque es muy, muy importante, además es una buena práctica que te ahorrará muchos quebraderos de cabeza e incluso te acabará ahorrando mucho tiempo.

Realiza las ilustraciones finales

Llega la parte que más me gusta.

Una vez que tengas el monstruo preparado y revisado y requeté revisado, es hora de crear las ilustraciones que formarán tu álbum.

Ya sean a color o en blanco y negro, dedícale todo el cariño del mundo a hacerlas y disfruta del proceso. Haz que todo cobre sentido.

Maqueta tu álbum ilustrado.

Por fin tienes tu álbum preparado, has escrito la historia, has dibujado y coloreado todo el álbum, en fin, has hecho todo lo que tenías que hacer y lo has realizado tal y como lo preparaste en el monstruo. Ahora es el momento de ponerlo todo en su sitio para que encaje como un guante.

Para enseñarte a maquetar tendría que escribir otro artículo completo, por lo que este apartado no será un tutorial de cómo maquetar tu álbum, además ya hay mucha información en internet de cómo hacerlo. Pero sí que te voy a darte algunos tips y directrices de cómo hacerlo adecuadamente.

Para maquetar mis álbumes utilizo Adobe InDesign, puedes utilizar el programa que más te convenga y se adapte a lo que necesitas o sepas utilizar, no voy a entrar en opinar sobre software de maquetación. Tan solo quiero que sepas de qué hablo en cada momento.

Al crear el proyecto, añade 3mm de sangrado como mínimo. Coloca tus ilustraciones asegurándote que encajen justo en las líneas de sangrado (sí, todo lo que esté en el sangrado podría perderse a la hora de llevarlo a imprenta, pero para eso hicimos el margen alrededor del dibujo).

A la hora de elegir la tipografía, tómate tu tiempo, asegúrate de que sea entendible, sin ser una tipografía demasiado formal, ya que finalmente lo haces para los niños. Además, queda mejor si combina con tus ilustraciones.

Para elegir el color de la tipografía, elige uno que esté basada en los colores de tus ilustraciones, eso sí, que haya contraste, por ejemplo, si tu ilustración tiene un color azulado oscuro en general, tal vez un celeste claro puede quedar bien. Si por el contrario, la imagen tiene tonos azules claros, utiliza un azulón oscuro para el texto. Recuerda, es importante el contraste para que el texto sea legible.

En ocasiones hay trabajos en los que utilizar un mismo color para todos los textos del álbum puede ayudar a crear unidad, por lo que no te obsesiones con los colores si crees que esto puede ser más adecuado para tu libro.

¿Cómo hacer una gran portada para tu álbum infantil?

Nadie duda de la importancia de la calidad del interior del álbum, pero tengo algo que decirte, que muchos pasan por alto, hay que prestar la misma o más atención a la portada, ya que es lo que pude marcar la diferencia entre que compren o no tu álbum ilustrado.

En serio, no sabes cuánta genta pasa por alto este paso.

Por eso creo que es importante realizar este apartado, para que aprendas a realizar una portada lo más atractiva y comercial posible.

 En la creación de portadas para libros de no ficción o de literatura, hay ciertas reglas importantes que tener en cuenta cuando vas a realizar una portada, en el álbum ilustrado infantil, esas reglas son más elásticas, por lo que es que es más complicado de definir. A pesar de eso, creo que estos consejos te pueden ayudar a crear una gran portada. Son los mismos que tuve en cuenta a la hora de crear mis portadas.

  • En el título utiliza una tipografía atractiva y de fácil lectura. No utilices tipografías enrevesadas o demasiado pequeñas.
  • El protagonista de tu álbum tiene que aparecer en la portada, siempre que puedas, a los niños les gusta saber quién es el héroe o heroína de su cuento. Y si se identifican con el personaje, esa portada será mucho más potente.
  • Los ojos son un reclamo muy poderoso y quien se dedica al a publicidad y el marketing lo sabe. Si solo aparece la cara de la persona o algún rasgo concreto, intenta que sean los ojos, porque son realmente atrayentes.
  • No satures. Ya te he dicho lo importante que es que tu portada llame la atención, pero también lo es que se entienda correctamente, en un solo vistazo el niño tiene que entender lo que está viendo, por eso, no satures de elementos y colores tu portada.
  • No te obsesiones. Como te contaba, las reglas son muy elásticas y puede funcionar perfectamente una portada minimalista con el personaje de espaldas y lejano, con tipografías sutiles y manuscritas o una tipografía gigante de palo seco… todo lo contrario de lo que te he contado justo arriba. Por eso te recomiendo que hagas todos los bocetos y pruebas que puedas, ya que también dependerá mucho de la historia que estés contando. En serio, tómatelo con calma, ya que el 80% de que se venda tu libro, depende de ello.

Resumen

Espero que te haya gustado esta información, te animo a COMPARTIRLO con quien quieras. Te invito también a dejarme tu comentario y tus dudas, te contestaré lo antes posible

Deja un comentario


Responsable Eduardo del Corral.
Finalidad Gestionar los comentarios del blog.
Legitimación Consentimiento del interesado.
Destinatarios Los datos que me facilitas se almacenarán en el proveedor de hosting Webempresa. No se ceden a terceros.
Derechos Podrás ejercer tus derechos de acceso, rectificación, limitación y suprimir los datos en eduardodelcorral3d@gmail.com, así como el derecho a presentar una reclamación ante una autoridad de control.
Información adicional Puedes consultar información adicional y sobre Protección de Datos en la política de privacidad.

Las 5 razones por la que la mayoría de ilustradores no alcanza su máximo potencial al diseñar personajes.

Y cómo evitarlo en 4 minutos.

Además de descargar el ebbok, recibirás un correo diario con consejos y trucos que te pueden interesar como artista e ilustrador.

Responsable: Eduardo del Corral.

Finalidad: Envío de mis publicaciones, así como correos comerciales.

La Legitimación: Es gracias a tu consentimiento.

Destinatario: Tus datos se encuentran alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign cuyo titular es Active Campaign LLC alojada en EEUU y suscrita al EU PrivacyShield.

Podrás ejercer tus derechos de acceso. Rectificación, Limitación, o Suprimir tus datos enviando un email a edu@eduardodelcorral3d@gmail.com o ante la Autoridad de Control. Encontrarás más información en Políticas de privacidad.